Cuatro cosas que nunca debes hacer cuando viajas – ¡y por qué!
Al planificar tu próximo viaje, es importante tener en cuenta las cosas que puedes hacer para que tu estancia sea lo más tranquila posible. Una de las mejores formas de hacerlo es evitar los errores más comunes que la gente suele cometer al viajar, a menudo sin darse cuenta. Aquí tienes cuatro cosas que nunca debes hacer cuando viajas y por qué.
Alquilar un coche
La gente alquila coches por todo tipo de razones: para visitar a sus familiares, explorar una nueva ciudad o incluso para hacer recados. Y aunque alquilar un coche puede ser cómodo a veces, a menudo es un gasto innecesario, por no hablar de las molestias. Cada vez que tengas que pagar gasolina, verás que no es tan beneficioso alquilar un coche.
No tener seguro médico
En primer lugar, el seguro médico proporciona protección financiera contra una serie de enfermedades o lesiones inesperadas que pueden ocurrir durante las vacaciones. Si no tienes seguro, podría costarte una fortuna pagar una visita al médico o al hospital. Podrías tener que recurrir al autotratamiento con medicamentos y productos de venta libre, lo que puede poner en riesgo tu salud si se hace de forma incorrecta. La mejor manera de evitar estos problemas es tener un seguro médico de viaje. Es asequible, fácil de conseguir y cubrirá cualquier emergencia médica que puedas encontrar en el extranjero.
Quedarte en un alejamiento económico para ahorrar dinero
Los costes de alojamiento pueden aumentar rápidamente, especialmente si viajas a algún lugar en temporada alta. Los albergues y hoteles más baratos suelen estar agrupados en distritos populares de la ciudad; sin embargo, también pueden traer todo tipo de sorpresas desagradables. Me he alojado en varios alojamientos económicos que eran ruidosos por la noche, o que no tenían aire acondicionado (lo cual es un gran problema cuando hay 40 grados centígrados en el exterior). Puede que acabes pagando más por un hotel económico que por uno más caro situado en una zona mejor. Si voy a gastar dinero en alojamiento, prefiero gastarlo en algo que haga mi viaje más agradable, como una bonita habitación de hotel con aire acondicionado.
Olvidar que tu viaje es algo más que ir del punto A al punto B.
Estás de vacaciones: desconectado, sin disculpas y totalmente libre. Y aunque parezca contrario a la intuición, centrarse únicamente en los destinos es un error. Es cierto que las vacaciones consisten en ir del punto A al punto B, pero también consisten en sumergirse en un destino, explorar lo que lo hace único, comprobar nuevas experiencias, conocer a los lugareños que pueden enseñarte el lugar. Así que la próxima vez que planees un viaje, no te limites a reservar los vuelos; empieza a investigar dónde quieres ir y cómo quieres llegar. Cuanto más conocimiento tengas antes de salir de casa, mejor será tu experiencia una vez que llegues.